Quiero escribirte a diario

Y vaya que quisisera saber de ti.

Pero me pusiste condiciones.

Primero fue que estabas ocupada y que ya no nos podíamos ver.

Luego, que ya no escribiera después de las once.

Luego, que ya no te escribiera porque estas ocupada.

Y ahora vienes y me hablas.

Y sólo para que te busque y ver como con otros, si sales a deshoras, si tienes el tiempo libre... y conmigo sólo pretextos.

Ni siquiera me das tu honestidad o tu franqueza.

Solo te limitas a decirme "estoy ocupada".

No te imaginas cuando duele eso.

Así que vienes, para que? 

Cómo debo interpretarlo? 

Eres bondadosa porque me regalas de tu tiempo?

Tu me pusiste todas estas estúpidas condiciones para hablar contigo...

No soy un adivino. Y no voy a dejar de cumplirlas.

Porque eres mujer, y sé que cuando veas que pierdes, buscarás mis errores.

Pero solo encontrarás los tuyos.

Veras todas las condiciones que me pusiste.

Todos los muros.

Todo el hielo que puse.

Tu no quieres ser mi amiga, ni nada.

Solo quieres un esclavo que te atienda sentimentalmente cuando te sientas sola.

Yo no gano con eso.

No acepto el trato.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Jaladón, ahora si que se la...

Cuentos de Primaria - La lechera y el jarro de leche.