Habemus Papam - My name is: Francisco



¿Que diría Jesús si viera que su "representante" gobierna desde una silla de oro, cuando el predicaba con la humildad e incluso vender todos sus bienes para donar a los pobres?. Mucho ruido con el mentado nuevo papa, que representa a una iglesia (un poder político, de hecho) más que a un Dios... en el fondo creo que todos lo sabemos: TODOS representamos a Dios con nuestras acciones, independientemente de nuestra religión. Amar al prójimo fué lo mejor que nos pudo enseñar Jesús. Lo demás es humo... humo blanco





Lo anterior lo leí en facebook.

Este comentario lo respaldo, pues posee toda la razón. Pero faltan aclarar varios puntos.





El Papa Juan Pablo II había logrado manejar la mediatización a su favor. Desde entonces todo lo malo era ocultado, olvidado. Es más, nunca pasó.
El Papa Juan Pablo II fue el primero en manejar correctamente la imagen corporativa. La iglesia lució hermosa a manos de su Rock Star favorito: Karol.
Historias, versiones, películas. Todos debíamos conocer al Papa como Juan Pablo II, pero tuvimos que enterarnos de su vida y sufrimiento. Lo conocimos por Karol.
Su vida al estilo Hollywood nos llevo una historia de todo está bien.
Cuando visitaba México, las escuelas dejaban de dar clases, pues el fanatismo de los profesores erraban al preferir mirar la tele pero acertaban al dejar a sus alumnos sin clase, sin absurdas enseñanzas, sin doble moral, sin aquella enseñanza que aprisionaba. Sin quererlo, nos estaban enseñando a no quererlo.
Su muerte, fue la más anunciada e incluso la más preparada.
Cobertura de una semana las 24 horas, al menos en México, a cargo de Tv Azteca y conducida por Javier Alatorre. Que comenzó desde que se había enfermado, hasta la confirmación de su muerte.
La selección del nuevo Papa, el Cónclave, también se transmitió en cobertura especial. Millones de espectadores y quién sabe cuantos ingresos pudieron tener.
Cuando salió Benedicto XVI su poca estética ante la cámara fue la causa de nadie confiara o creyera en él.
Millones de pseudo-críticos, comenzaron a criticarlo, pues se dejaban guiar por sus estereotipos.
La belleza y docilidad en el rostro de Juan Pablo II eran sagradas, tanto así que hasta la fecha nadie lo usa para criticar o burlarse (que es otra forma de critica).
La poca o nula belleza física de Benedicto, le hizo ser el primer mártir de los católicos poderosos. Al estilo Nixon contra Kennedy.



Comenzando con acusaciones de Pedofilia. Incluso en tiempos donde el Papa Juan Pablo II era el responsable. Es decir acusaciones retroactivas.
Seguido de motes como Peneadicto, Veneadicto, Nazi, Hijo de Hitler.
Por si esto fuera poco, su físico parecido a un villano de Star Wars que, perdonen: aún no me animo a ver.
Esto le valió entre otras cosas la poca credibilidad de sus acciones a favor de la unificación. Yo que sé si eran sinceras o no. Pero cualquier intento que él hizo por calmar las aguas, estas fueron en vano. Tal vez los niños se habían hecho ya adolescentes y fans de Anonymus o eran internautas pendientes del Vatileaks. O quizá acusadores sin un mejor quehacer que criticar al mínimo actuar de la iglesia.


Esto, mejor dicho, le hizo valer nada su mandato. Fue con él, con el feo, el perro flaco, a quienes las pulgas ideológicas y libertarias que se le cargaron.


Con él sí, pero con los otros no.


Se fue, dice que fue por salud. Si, por la salud de los católicos. Vaya usted a saber si es para que amen al prójimo o para que paguen el diezmo.


Pero fue lo mejor.


Ahora, viene un argentino, que distrae de las polémicas pues los chistes sobre él es que es argentino. Lo cual en broma "es malo" pero en realidad es muy bueno, pues Argentina no tiene un pasado tan privilegiado como Italia ni menos, tan turbulento como Alemania.


Argentina. ¿Porqué? Pensemos mal y acertaremos.

Los principales problemas de violación a menores se han dado en Latinoamérica.
Argentina su más mala referencia es la adicción de Maradona, pero fue un gran jugador.
Los argentinos tienen la fama de orgullosos, de ahí los chistes y burlas.
Mientras el mundo se entretiene burlándose de la nacionalidad de origen de Francisco, se olvida de las acusaciones y porqué no: los sacerdotes que deberían estar presos siguen infringiendo la ley y destrozando hogares.
¿Porque Argentina? ¿Y porqué no?


Los que antes acusaban a Bendicto XVI se han tragado el cuento de que han ganado y han destituido a un Papa, pero sólo han caído en el plan del Ratzinger y sus amigos.


Ahora esos idealistas emocionados con tal logro, irán a proseguir con sus vidas de manera satisfactoria, sin darse cuenta de que el error sigue vigente aunque sólo haya cambiado de nombre.


¿No criticarán al nuevo Papa?


¿Le seguirán exigiendo cuentas por los crímenes cometidos por los sacerdotes católicos?


Espero que sí.


Sóy católico, pues comparto una creencia, pero no una forma de pensar.


Creemos en lo mismo, de distintas formas.








FIN
Abraham Arreola

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